¿LA INTELIGENCIA, SE ADQUIERE O SE HEREDA?
Supongamos por un instante que es innata, que nace con el niño, como su nariz o el dedo pulgar. Se iría formando en el vientre materno y el niño nacería con ella, puede ser, incluso, que hasta dependiera de la genética, algo así como de padres inteligentes nacerán niños inteligentes. De esta manera, naceríamos con el coeficiente que tendríamos toda la vida, como tenemos que soportar toda la vida una nariz aguileña o los ojos marrones. Pero la inteligencia no es inalterable, no es cierto que nacemos ya con la inteligencia que vamos a tener toda la vida. Puede que nazcamos con el genio y la habilidad de nuestros abuelos, pero no con su inteligencia.
Por supuesto no se adquiere inteligencia como si fuéramos a comprar manzanas al mercado. La adquisición de inteligencia depende de muchos factores, factores que conciernen no sólo al individuo, sino al ambiente en el que vive. Incluso el mismo término de inteligencia puede producir cierta confusión, porque se ha usado para designar más de una cosa, quizás deberíamos haber empezado limitando qué entendemos por inteligencia.
Si nos atenemos a su significado etimológico, inteligencia sería algo así como el saber elegir entre varias opciones. Y no está muy lejos el concepto que de ella se tiene en la actualidad. Pero es un tema tan amplio y tan tratado por disciplinas tan diversas que nos encontramos multitud de definiciones.
sicólogos y pedagogos, psiquiatras y científicos, coinciden en identificar a la inteligencia como la habilidad que nos permite hacer o entender algo. Y atendiendo a este sentido de la inteligencia, nos encontramos con una clasificación muy interesante facilitada por Howard Gardner, para el que hay ocho tipos de inteligencia, que atienden, precisamente, a las habilidades que podemos desarrollar.
Disponible en: https://inakigoldarazvalencia.wordpress.com/2012/12/15/ la-inteligencia-se-adquiere-o-se-hereda/. Acceso em: 04 de jul. 2020. (Adaptado).
De acordo com o texto, assinale a alternativa correta.